¿CÓMO APROVECHAR LA CARNE SOBRANTE DE UN COCIDO GALLEGO?

Después de un día de fiesta con la familia y de haber comido un buen cocido gallego, con su sopa de cocido, sus Freixos, sus Grelos con Cachelos, Chorizos, Costilla, Lacón y Cachola, nos ha sobrado una gran cantidad de carne, sobre todo de lacón y de cachola. Pues bien, al día siguiente, lo he cogido todo y con ello he preparado un buen embutido, chicharrones o Rexos (Chicharrones en Gallego), como le queráis llamar.

A continuación, os dejo los pasos que he seguido para su preparación:

1. Deshuesar y Picar en trozos muy pequeños la carne que nos ha sobrado de hacer el cocido, bueno, es este caso fue de cocido, pero lo podéis hacer con otros tipos de carnes, sobre todo si son grasas.
2. Ponemos la carne picada en una pota, no hace falta aceite, la propia carne con el calor soltara la grasa.
3. Añadimos unas hojas de Laurel.
4. Añadimos bastantes granos de Pimienta Negra, le dará algo de alegría al embutido.
5. Ponemos la pota al fuego, el fuego debe de estar muy bajo para que se vaya calentando muy lentamente.
6. De vez en cuando revolvemos toda la mezcla, iremos viendo que va soltando grasa y las carnes se van mezclando de una forma homogénea.
7. Retiramos de la Pota las hojas de Laurel.
8. A las 5 o 6 horas los sacamos de la pota y los ponemos en un escurridor, si queréis lo podéis dejar más tiempo, y mejoraran.
9. Con una espumadera los apretamos y soltará la mayoría de la grasa sobrante.
10. A continuación, le ponemos algo plano por encima y un peso para que sigan escurriendo mientras enfrían.
11. Una vez que estén totalmente fríos ya los podemos sacar del escurridor y ya los tenemos terminados.

Si os sale una gran cantidad de carne podéis hacer lo que hice yo, partirlos en varios trozos mas pequeños y congelarlos. También podéis envasarlos al vacío, de este modo se conservan varios meses sin ningún problema.

Para comerlos os planteo varias opciones:

1. Cortado en lonchas finas lo podremos comer en un plato o tabla junto a otros embutidos, como aperitivo.
2. Podremos hacer unos bocadillos impresionantes, fríos o pasados por la sartén, vuelta y Vuelta.
3. Podemos cocer unas patatas y luego mezclarlos con ellas, si pincháis aquí, accederéis a la receta que tengo publicada de como se preparan.

Ya lo dejo aquí, estoy seguro que se os ocurrirán otras formas para prepararlos.

                  ESPERO QUE OS GUSTEN!!!!

El aprovechamiento de la comida es una práctica importante que tiene múltiples beneficios tanto para los individuos como para la sociedad en general. Este concepto se centra en maximizar el uso de los alimentos y minimizar los desperdicios, lo cual es crucial en un mundo donde los recursos son limitados y la seguridad alimentaria es una preocupación constante. Hay varias estrategias y prácticas que se pueden adoptar para aprovechar mejor los alimentos:

• Planificar las comidas con anticipación para comprar solo lo necesario.
• Hacer una lista de compras y ceñirse a ella para evitar compras impulsivas de alimentos que no se necesitan, para ello es bueno comprar después de haber comido.
• Conocer las mejores prácticas para almacenar diferentes tipos de alimentos puede extender su vida útil.
• Usar el refrigerador, congelador y despensa adecuadamente para preservar la frescura de los alimentos.
• Reutilizar sobras en nuevas comidas es una excelente manera de reducir el desperdicio.
• Experimentar con recetas que permitan el uso de ingredientes que están por caducar.
• Técnicas como el enlatado, secado y fermentación pueden prolongar la vida útil de los alimentos y reducir el desperdicio.
• Convertir desechos de alimentos en compost para el jardín, en lugar de tirarlos a la basura, contribuye a un ciclo de nutrientes sostenible.
• Aprender y enseñar sobre el valor de los alimentos y el impacto del desperdicio alimentario puede fomentar prácticas más sostenibles.
• Donar alimentos no utilizados a bancos de alimentos o a personas necesitadas puede ayudar a aquellos en situación de inseguridad alimentaria.

El aprovechamiento de la comida no solo ayuda a reducir el desperdicio de alimentos y a conservar los recursos naturales, sino que también puede ofrecer beneficios económicos al reducir los gastos en alimentos. Además, tiene un impacto positivo en el medio ambiente al disminuir la cantidad de desechos que terminan en vertederos, lo que a su vez reduce las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas con la descomposición de los alimentos. Implementar estas prácticas puede requerir un cambio de hábitos y una mayor conciencia sobre cómo nuestros comportamientos alimentarios afectan al mundo que nos rodea.